viernes, 2 de abril de 2010

Hoy he conocido el terraplén sangrante


Hoy he conocido el terraplén sangrante,
la herida en el ojo, abierto, de la vaca.
La ojiva negra perdida en el semblante,
la voluntad de amar el pozo de la nada.

He visto a mi lado las caras de la muerte,
el cascabel faltante de las horas de amor.
La cruz de Cristo, partida, en mil pedazos,
la triste encrucijada de odios malhabidos.

He visto, he conocido, he sentido a mi lado
la enfurecida bestia de la triste venganza.
El humo envenenado de horas no vividas.

Hoy he vivido sin par mi nacimiento,
mi original manera de nacer a la vida.
El colosal, surgimiento de un poema.


Miguel Menassa
De "Poemas y cartas a mi amante loca joven poeta psicoanalista"

2 comentarios:

  1. Hermoso poema!!!
    Es un placer siempre!
    un abrazo

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  2. La poesía es también génesis de todos los sentidos, qué bien lo dice tu poesía. Un placer navegar por tus versos. Saludos.

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