domingo, 8 de enero de 2012
INTRODUCCIÓN SEGUNDA, O COMPLEJO DE CASTRACIÓN EN EL HOMBRE MASCULINO
Cualquiera podía arrebatar mi alegría
Yo era tu voz y el cuerpo de la lluvia
Yo era el espigado y salvaje
Jesucristo moderno
tenía mis manos y mis pies
Perfectos.
ligeros pies manos ligeras para la cruz.
Tuve los años jóvenes y toda la rebeldía de la pasión.
Tuve mi cuerpo al aire libre
Cualquiera podía dejar sus excrementos entre mis flores
y partir.
Yo era tus oídos y el viento de primavera
Yo era el criminal
Tenía en medio de los genitales un corazón
un corazón sediento, un perfecto andar entre mujeres.
Ya tuve 33 años y fui crucificado
DOLOR
dolor para el que muere todas las mañanas
Dolor para el que ya no tiene piedad de sí.
Miguel Oscar Menassa
De "Psicología animal y arte", 1975
viernes, 10 de septiembre de 2010
CARTA a CARL-ERIK SJOBERG
Han pasado por mí, dioses y demonios, pequeños héroes de papel y tigres hambrientos, virtuosos y sagaces equilibristas, ha pasado la muerte y ha lamido con su grandiosidad mi saber.
He cortado todas las raíces, suelo por las tardes quedar suspendido en el espacio.
La palabra no fluye en la medida de mis posibilidades, es lento y caprichoso su fluir. Como un deseo que tarda en reconocerse, como el deseo de quien ignora todavía el final.
Ignoro el final de mi escritura, mi escritura me lo revela todo, menos los mecanismos de su fin.
Si quiero la locura, la locura viene y hace sus estragos. Si ambiciono la carne, la carne acontece hasta el hartazgo, hasta la humillación.
Si me acontecen los horrores del hambre nadie me negará su pan, nadie ocultará su cuerpo a mi voracidad.
Pero si a mi escritura le pidiera su fin, me encontraría sin más en un pozo ciego de mierda y de blasfemias. Ella detiene su curso cuando me vuelvo torpe y desconfiado. Ella necesita de mí un fanático, un alucinado por ella. Un dios o un semidiós o una basura humana pero todo por ella. Ella necesita de nuestra prosternación. Yo me prosterno.
Bendigo que ella me tenga entre sus huéspedes, entre aquellos que pueden visitarla en cualquier hora del día o de la noche.
Cuando está conmigo y yo me olvido de preguntar por el final, ella me da el lugar de los que saben, de los que pueden leer en su cuerpo las palabras del siglo. Alguna vez me entregaré a ella para siempre, sin importarme cuál será el final, sin importarme cuál será la vida, pero que sea.
Miguel Oscar Menassa
De "Psicología animal y arte", 1975
domingo, 7 de febrero de 2010
De "Psicología animal y arte" de Miguel Oscar Menassa
24 de diciembre
Hoy murieron casi cien personas en esa sorda guerra que no termino de entender.
Murieron sin saber que la guerra también es una ilusión.
¿Compañeros hombres o pequeñas bestias desoladas?
¿quiénes murieron hoy?
¿qué sórdido deseo social produjo la catástrofe?
25 de diciembre, una de la mañana
He brindado a las doce de la noche y me he dado cuenta que faltan algunos. Me siento abandonado por la pasión de los encuentros. Alguno de mis amigos perfumará su noche con mi ausencia.
No entiendo la guerra y sé que la paz es imposible.
Pronto una ilusión
o me voy a
pique.