estoy en el desierto de los cielos.
Una cadena atada a una ilusión,
una ilusión girando, enloquecida,
alrededor de una cadena.
Un acertijo donde leches blancas y perfumadas
caen en el corazón de la noche.
Vértigo entre las sombras,
asteroide decapitado por huracanes de jugos y cartílagos.
Pájaros inmóviles,
aguas de una vertiente al límite de sus fuerzas,
pájaros como árboles,
florecen.
aguas de una vertiente al límite de sus fuerzas,
pájaros como árboles,
florecen.
Miguel Oscar Menassa
De "La patria del poeta"
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