HAY DÍAS COMO HOY
Hay días como hoy que no pasan nunca.
Son días como una espesa niebla
en la garganta, al borde del abismo.
Esos días de Freud frente a la angustia
de no poder saber, exactamente
hasta más adelante.
Esos días inolvidables de César Vallejo
enfrentando a la muerte con el crujir del pan.
Esos días de la triste cerveza
donde algún poeta pobre, mediocre o muy sentimental,
se dio cuenta que en el siglo que viene
nadie lo leería.
Esos días donde se rompe el alma
para que las palabras alcancen el poema y, también,
esos días donde el poema nos abandona,
definitivamente,
para inventar el alma.
Hay días como hoy que no pasan nunca.
Son días como en la guerra
cuando la mujer del enemigo me enamora.
Días aciagos, grises...
ResponderEliminarde interminable espera del cobijo reparador de la noche.
Muy bellos decires...
Saludos
Saludos, Silvia Beatriz. Gracias por tu visita y comentario.
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